Terrores nocturnos

Terrores Nocturnos

¿Tu bebé se despierta gritando en mitad de la noche? Exacto. Son los temidos terrores nocturnos. Asustan mucho a las familias, pero no te preocupes, porque los niños que lo padecen no son conscientes de lo que pasa y al día siguiente no recuerdan nada.

¿Qué son?

Los terrores nocturnos son episodios de miedo y agitación que ocurren durante el sueño profundo, generalmente a las 2-3 horas de estar dormidos. A menudo, los niños pueden gritar, llorar o actuar confusos durante estos episodios, sin recordarlos al despertar. Es importante distinguirlos de las pesadillas, ya que los terrores nocturnos suelen suceder en las etapas más profundas del sueño. Los peques pueden abrir los ojos y parecer que están despiertos, pero no es así.

Aunque la causa exacta de los terrores nocturnos no se conoce completamente, se cree que factores como el estrés, la fatiga, la falta de sueño y la genética pueden desencadenarlos. Otra causa puede ser que se quede pausado en un ciclo y ahí surge el terror nocturno. También, cambios en la rutina de un niño, algún cambio importante (como la retirada del pañal, del chupe, empezar la escuela infantil o la guardería, mudanza…), pueden contribuir a la aparición de estos episodios.

¿Cuándo empiezan y cuándo terminan los terrores nocturnos?

Suelen comenzar a partir de los 18 meses y pueden persistir hasta la adolescencia temprana, pero cada niño es diferente. A medida que el sistema nervioso de un niño se desarrolla, es posible que estos episodios disminuyan con el tiempo.

¿Son terrores nocturnos o pesadillas?

Las pesadillas son sueños aterradores que ocurren durante la fase de sueño REM (movimiento rápido de los ojos). El niño suele recordar el contenido de la pesadilla y puede despertarse asustado. Está consciente de lo que sucedió.

Mientras que, los terrores nocturnos son episodios de agitación extrema que ocurren durante las etapas más profundas del sueño, no en la fase REM. El niño no recuerda el contenido del episodio y no está completamente consciente de lo que está sucediendo.

Mantén la calma

Durante un episodio, evita gritar o asustarte. Tu tranquilidad puede ayudar a tu hijo a calmarse más rápido.

A diferencia de las pesadillas, los niños en medio de un terror nocturno no son conscientes de su entorno. Tratar de despertarlos puede causar confusión y aumentar la ansiedad.

Si tu hijo se levanta de la cama, guíalo suavemente de vuelta a la cama para evitar lesiones. Mantén una vigilancia discreta para asegurarte de que no se haga daño.

Mantener un horario de sueño regular y relajante puede reducir la probabilidad de terrores nocturnos, y no te preocupes no afectan a la salud.

Aunque sean minutos eternos, mantén la calma y dale mimos si los necesita para que sepas que estás ahí, poco a poco se irá tranquilizando y se volverá a dormir.

¿Se pueden prevenir?

Observa si siempre ocurren a la misma hora, se podría hacer un despertar programado.

En algunas ocasiones son hereditarios, pero con buenos hábitos de sueño, pueden no pronunciarse.

Suelen aparecer por sobre cansancio o por quitar la siesta antes de tiempo, por lo que mejorará la higiene del peque y puede ayudar a reducirlos.

Terrores nocturnos

Si te enfrentas a terrores nocturnos con tu baby y necesitas orientación personalizada para mejorar su calidad de sueño, ¡no dudes en contactar conmigo! Como asesora de sueño infantil, estoy aquí para ayudarte a ti y a tu familia a descansar mejor y vivir sin preocupaciones.

Si quieres más consejos sobre el sueño infantil y cómo establecer un vínculo saludable, échale un ojo a mi último post. Encontrarás estrategias efectivas para fomentar una relación cercana con tus hijos mientras mantienes un sueño reparador para todos.

No Comments

Post A Comment
Abrir chat
¿Hablamos?
¿Hablamos?
Hola. 🙋🏼‍♀️ Soy Belén! Gracias por ponerte en contacto conmigo. 🌜 ¿En qué te puedo ayudar?